A LOS ARTICULOS DE LA FUNDACION 

LA OBSERVANCIA DE LA UNIDAD DE LA FE

INTRODUCCION

 

Carta No. 4: Un solo Bautismo

 

 

“Un cuerpo hay, y un espíritu, así como ustedes fueron llamados en la sola esperanza a la cual fueron llamados; un Señor, una fe, un bautismo; un Dios y Padre de todos, que es sobre todos y por todos y en todos.”

- Efesios 4.4-6

   El Único bautismo es el curso que el cristiano emprende cuando él o ella decide seguir adelante con la convocatoria a una sola esperanza.

   Las escrituras cristianas hablan básicamente de dos bautismos - el bautismo de Juan y el bautismo en el nombre de Jesús.

El bautismo de Juan

   El bautismo de Juan era para el pueblo de Israel solamente.

 

“De la prole de este [hombre], según su promesa, Dios ha traído a Israel un salvador, Jesús, después que Juan, antes de la entrada de Aquel, había predicado públicamente a todo el pueblo de Israel bautismo [en símbolo] de arrepentimiento.”

- Hechos 13:23,24

   Se realizó en el agua en el símbolo de arrepentimiento por sus pecados contra el Pacto de la Ley para que pudieran aceptar a Jesús cuando llegó.

“Pablo dijo: “Juan bautizó con el bautismo [en símbolo] de arrepentimiento, diciendo al pueblo que creyeran en el que había de venir después de él, es decir, en Jesús.”

- Hechos 19:4

 

   Dado que sólo el pueblo de Israel estaban en una relación de pacto con Jehová, sólo ellos estaban en necesidad de arrepentimiento. Los que no son israelitas nunca habían acordado mantener la ley y por lo tanto no era necesario "sentir pesar" por no mantenerla, o para "enderezarse" con él. El mismo Juan enseñó que su bautismo fue sólo preparatorio, pero que otro vendría despues de El que realizarían un mayor bautismo con el espíritu santo y con fuego.

“Yo, por mi parte, los bautizo con agua a causa de su arrepentimiento; pero el que viene después de mí es más fuerte que yo, y no soy digno de quitarle las sandalias. Ese los bautizará con espíritu santo y con fuego.”

- Mateo 3:11

   Este es el bautismo mayor con Espíritu Santo y con fuego que es el único bautismo para todos los cristianos, tanto israelitas y no israelitas.

 

   Que el bautismo de Juan en símbolo de arrepentimiento no era el verdadero bautismo se hace evidente en el caso de Apolos y ciertos Efesios:

“Ahora bien, cierto judío de nombre Apolos, natural de Alejandría, varón elocuente, llegó a Éfeso; y estaba bien versado en las Escrituras. Este había sido instruido oralmente en el camino de Jehová y, puesto que estaba fulgurante con el espíritu, iba hablando y enseñando con exactitud las cosas acerca de Jesús, pero conocía solamente el bautismo de Juan. Y comenzó a hablar con denuedo en la sinagoga. Cuando lo oyeron Priscila y Áquila, lo tomaron consigo y le expusieron con mayor exactitud el camino de Dios." 

- Hechos 18:124-26

 

“En el transcurso de los sucesos, mientras Apolos estaba en Corinto, Pablo pasó por las partes del interior y bajó a Éfeso, y halló a algunos discípulos; y les dijo: “¿Recibieron espíritu santo cuando se hicieron creyentes?”. Ellos le dijeron: “¡Si nunca hemos oído si hay o no espíritu santo!”. Y él dijo: “Entonces, ¿en qué fueron bautizados?”. Dijeron: “En el bautismo de Juan”. Pablo dijo: “Juan bautizó con el bautismo [en símbolo] de arrepentimiento, diciendo al pueblo que creyeran en el que había de venir después de él, es decir, en Jesús”. Al oír esto, se bautizaron en el nombre del Señor Jesús. Y cuando Pablo les impuso las manos, vino sobre ellos el espíritu santo, y empezaron a hablar en lenguas y a profetizar.”

- Hechos 19:1-6

    Como Judios, habían sido bautizados en el bautismo de Juan, pero como cristianos, ahora necesitaban ser bautizado en el bautismo mayor en el nombre de Jesús.Sólo entonces iban a recibir el Espíritu Santo prometido.

El Bautismo en el Nombre de Jesús

 

   El bautismo en el nombre de Jesús también se realiza en el agua, pero en lugar de ser en símbolo de arrepentimiento, es en símbolo de la participación en la muerte de Cristo.Sin esta muerte simbólica, todavía estamos en nuestros pecados y destinados a ser destruidos. Pablo explica esta muerte simbólica y nuestra absolución del pecado en el libro de Romanos:

“Por consiguiente, ¿qué diremos? ¿Continuaremos en el pecado, para que abunde la bondad inmerecida? ¡Jamás suceda eso! Ya que hemos muerto con referencia al pecado, ¿cómo habremos de seguir viviendo todavía en él? ¿O ignoran que todos los que fuimos bautizados en Cristo Jesús fuimos bautizados en su muerte?”

- Romanos 6:1-3

   Aquí, Pablo muestra que cuando somos bautizados en la muerte de Cristo, ya no estamos viviendo en nuestros pecados. Luego pasa a describir el simbolismo del bautismo en agua.

 

“Por lo tanto, fuimos sepultados con él mediante nuestro bautismo en su muerte, para que, así como Cristo fue levantado de entre los muertos mediante la gloria del Padre, así también nosotros andemos en novedad de vida. Porque si hemos sido unidos con él en la semejanza de su muerte, ciertamente también seremos [unidos con él en la semejanza] de su resurrección; porque sabemos que nuestra vieja personalidad fue fijada en el madero con [él], para que nuestro cuerpo pecaminoso fuera hecho inactivo, para que ya no sigamos siendo esclavos del pecado. Porque el que ha muerto ha sido absuelto de [su] pecado.”

- Romanos 6:4-7

   Durante el bautismo en agua, cuando somos sumergidos, esto simboliza nuestro entierro. Cuando somos levantados del el agua, simboliza que somos levantados como nuevas creaciones de Dios sin pecado.

 

“Por consiguiente, si alguien está en unión con Cristo, es una nueva creación; las cosas viejas pasaron, ¡miren!, cosas nuevas han llegado a existir.”

- 2 Corintios 5:17

   Cuando somos contados como nuevas creaciones, estamos entonces bautizados en espíritu santo como muestra de nuestra herencia espiritual.

“Pero ustedes también esperaron en él después que oyeron la palabra de la verdad, las buenas nuevas acerca de su salvación. Por medio de él también, después que ustedes creyeron, fueron sellados con el espíritu santo prometido, que es una prenda por anticipado de nuestra herencia, con el propósito de poner en libertad por rescate la propia posesión [de Dios], para su gloriosa alabanza."

- Efesios 1:13,14

“Él también ha puesto su sello sobre nosotros y nos ha dado la prenda de lo que ha de venir, es decir, el espíritu, en nuestros corazones.”

- 2 Corintios 1:22

 

“Ahora bien, el que nos produjo para esta mismísima cosa es Dios, que nos dio la prenda de lo que ha de venir, es decir, el espíritu.”

- 2 Corintios 5:5

   Este bautismo con Espíritu nos hace parte del único Cuerpo.

“ Porque, de hecho, por un solo espíritu todos nosotros fuimos bautizados [para formar] un solo cuerpo, seamos judíos o griegos, seamos esclavos o libres, y a todos se nos hizo beber un solo espíritu.”

- 1 Corintios 12:13

   Por el espíritu, vamos desde el bautismo simbólico al verdadero bautismo en el que compartimos la muerte de Cristo.

 

“Estoy fijado en un madero junto con Cristo. Ya no soy yo el que vivo; antes bien, es Cristo el que vive en unión conmigo. En verdad, la vida que ahora vivo en carne la vivo por la fe que es para con el Hijo de Dios, que me amó y se entregó por mí.”

- Galatas 2:20

   Aunque el bautismo simbólico en la muerte de Cristo - el bautismo en agua - Es un evento de una sola vez, el verdadero bautismo continúa hasta que hemos sido "unidos con él en la semejanza de su resurrección" como criaturas espirituales en el cielo Esta fue la forma del bautismo de Cristo. Después de su bautismo simbólico en el agua, el verdadero bautismo en la muerte continuó.

“En verdad, tengo un bautismo con que ser bautizado, ¡y cuán angustiado me siento hasta que quede terminado!”

- Lucas 12:50

 

   Todos los que persiguen el único bautismo deben seguir los pasos de Jesús en este sentido también. Note las palabras de Jesús a Santiago y Juan:

“Ellos le dijeron: “Podemos”. Ante eso, Jesús les dijo: “La copa que yo bebo ustedes beberán, y con el bautismo con que yo soy bautizado ustedes serán bautizados.”

- Marcos 10:39

   Jesús no dio detalles sobre que era la "copa" que tenía que beber, pero a partir del desarrollo de los acontecimientos podemos obtener una comprensión de lo que pudo haber estado involucrado.

 

   Aunque Jesús sufrió una muerte agónica dolorosa, la mayoría de sus discípulos no lo hicieron .Así que la   "copa" que los seguidores de Jesús también bebían no incluye necesariamente una muerte. Pero ya que Jesús era justo y sin pecado y por lo tanto tenía derecho a vivir, su muerte fue en sacrificio. Cuando la humanidad en general muere, no están sacrificando sus vidas, solo están pagando por sus pecados. Pero para aquellos que comparten en la muerte de Cristo, se cuentan como sin pecado. Por lo tanto, cuando mueren, la muerte se considera de sacrificio como el de su Señor.

 

   Además, las palabras de Jesús "la copa estoy bebiendo. "Confirma que el consumo de la" copa "está en curso. Se incluyó a su curso de la vida, la forma en que se condujo y lo que tuvo que soportar como consecuencia de ello. Fue el habla contraria que tuvo que soportar - que se le llamara blasfemo, y endemoniado – siendo perseguido por los falsos maestros, y cosas como éstas. Pero como Jesús completo con éxito su bautismo, nosotros también podemos.

“Les he dicho estas cosas para que por medio de mí tengan paz. En el mundo están experimentando tribulación, pero ¡cobren ánimo!, yo he vencido al mundo”.

- Juan 16:33

   Aquel bautismo es una pesada responsabilidad. La comprensión de la seriedad del Único Bautismo nos ayuda a ver por qué sólo unos pocos serán elegidos, porque no todos están dispuestos a beber la copa que Jesús bebió.

 

”Porque hay muchos invitados, pero pocos escogidos.”

- Mateo 22:14

”Entren por la puerta angosta; porque ancho y espacioso es el camino que conduce a la destrucción, y muchos son los que entran por él; mientras que angosta es la puerta y estrecho el camino que conduce a la vida, y pocos son los que la hallan.”

- Mateo 7:13,14

”No todo el que me dice: ‘Señor, Señor’, entrará en el reino de los cielos, sino el que hace la voluntad de mi Padre que está en los cielos. Muchos me dirán en aquel día: ‘Señor, Señor, ¿no profetizamos en tu nombre, y en tu nombre expulsamos demonios, y en tu nombre ejecutamos muchas obras poderosas?’. Y sin embargo, entonces les confesaré: ¡Nunca los conocí! Apártense de mí, obradores del desafuero.”

- Mateo 7:21-23

“Esfuércense vigorosamente por entrar por la puerta angosta, porque muchos, les digo, tratarán de entrar, pero no podrán,”

- Lucas 13:24

 

   Pero para aquellos que ven "los sufrimientos de la presente temporada como nada en comparación con la gloria que va a ser revelada en nosotros" (Romanos 8:18), le animamos a seguir hacia arriva, hacia la meta del supremo llamamiento, a ser miembros del único Cuerpo de Cristo, a fin de participar de su gloria. Asegúrese de que el bautismo es de hecho el único bautismo en la muerte de Cristo.

 

“Elaia Luchnia”

 

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